Los modos del ser
La casa se ha convertido en el universo personal. Desde aquí establecemos nuestra mirada y representamos nuestros modos de ser. Los objetos y espacios nos dan sentido. La identidad se construye, también, en relación con el otro. Todos los elementos forman parte de nuestra biografía.
Nos pensamos en un tiempo continuo, mientras vemos hacia atrás añorando las libertades de un tiempo pasado. Simultáneamente, observamos el futuro con miedo e incertidumbre. Esta tensión influye en la construcción de nuestro ser, así como en la forma en que nos proyectamos. Nos reconocemos sujetos del discurso que enunciamos.